Reseña: Crimen y Castigo de Fiódor Dostoievski.

CRIMEN Y CASTIGO DE FIÓDOR DOSTOIEVSKI

Autoconclusivo - Novela psicológica - 752 páginas - 1866

El joven Rodión Raskólnikov, antiguo estudiante, arrastra una existencia precaria en San Petersburgo. Cuando recibe una carta anunciándole la visita de su madre y su hermana en relación con los súbitos planes de boda de esta última, las fantasías de acabar con sus problemas a través del asesinato de la vieja prestamista a la cual suele recurrir van tomando cuerpo en su voluntad...

Fiódor Mijáilovich Dostoievski es un escritor ruso nacido el 11 de noviembre de 1821. Actualmente, es considerado uno de los más grandes autores de la literatura universal; no obstante, su vida estuvo marcada por hechos muy complejos. Para comenzar, su padre era muy violento y tenía ataques de ira bastante frecuentes, mientras que fue su madre la parte dulce de sus progenitores y terminó convirtiéndose en el refugio de Dostoievski. Pero su madre murió de tuberculosis cuando él tenía 16 años, aproximadamente. Un golpe durisimo para él y su padre, quien terminaría refugiandose en el alcohol (su padre muere varios años después, y el joven Dostoievski siempre cargó culpa por este hecho, puesto que en muchas ocasiones le deseó la muerte).

No sé si lo sabían, pero Dostoievski se graduó de la Escuela de Ingenieros Militares como subteniente. Su paso a ser escritor se dio porque su vida estuvo marcada por la epilepsia que sufrió, además de una ludopatía por la que tuvo enormes deudas y dependencia al alcohol (si, como su padre). Es así como decide traducir una obra de Balzac para ganar algo de dinero y en 1845 abandona definitivamente el ejército y se dedica del todo a la literatura. Su primera obra publicada fue Pobres gentes en 1846 que recibió una buena crítica; no obstante, sus siguientes obras no obtendrían el mismo éxito, lo que causó que se sumiera en un profundo estado depresivo.

En medio de todo esto, comienza a frecuentar un grupo clandestino de intelectuales liberales llamado Círculo Petrashenski, sus participantes fueron arrestados por las fuerzas zaristas por conspirar contra el zar Nicolás I. Fue condenado a muerte, aunque en último momento cambiaron el castigo por trabajos forzados durante cuatro años en Siberia. Después de que cumpliera su condena, se casara y enviudara, siguió con su adicción al juego que terminaría arruinandolo pero fue la experiencia que inspiró El jugador. Tras esto, el vuelve a San Petersburgo, y es allí donde comienza a escribir la obra que nos compete en esta reseña: Crimen Castigo. Esta fue publicada por entregas en la revista El mensajero ruso, y firmó un acuerdo editorial que consistía en que las ganancias iban directamente a sus acrededores y si se atrasaba en la entrega de los capitulos, debía pagar una multa.

Al final, moriría en 1881 de una hemorragia pulmonar asociada a un enfisema y a un ataque epiléptico. Fue leído por personas tan increíbles como Albert Einstein, quien decía que "Dostoievski me da más que ningún científico" y Virginia Woolf, quien afirmaba que "aparte de Shakespeare, no hay lectura más emocionante que Dostoievski". De hecho, se afirma que "Dostoievski es Rusia. Rusia no existe sin Dostoievsky". Y después de este gran preámbulo (que este autor merece), ahora si les contaré cómo me fue con esta novela.

"En la pobreza, uno conserva la nobleza de sus sentimientos innatos; en la indigencia, nadie puede conservar nada noble."

Para comenzar, este libro tuve que leerlo por clase (para los que no saben, estudio Estudios Literarios y Edición), pero necesité apoyo de mi Club de Lectura y varias personas terminaron uniendose a esta lectura conjunta improvisada. Lo mejor de leer este libro fue precisamente leerlo en compañía, nos conectabamos virtualmente a leer y así se avanzaba bastante y muy bien. No obstante, la novela en general me costó bastante y siento que no logré conectar del todo con los personajes y sus preocupaciones.

En esta novela tenemos como protagonista a Rodia, un jóven estudiante que camina por esas calles rusas vacías, putrefactas e injustas, pensando en cómo la sociedad va cada vez peor. El momento de dejar salir toda su rabia llega cuando se da cuenta de que para robar a su casera usurera, tiene que matarla. Efectivamente lo hace, y lo que se va a desprender de esto es una lucha de conciencia por confesar el crimen, así como una persecusión ¿imaginaria? que comienza a sufrir y que es bastante asfixiante. Rodia es un personaje con una conciencia muy fuerte, que desmuestra cómo, a pesar de que nadie vea lo que estamos haciendo, en realidad siempre tenemos que rendir cuentas a alguien: nosotros mismos.

Por otro lado, Sonia, el interés amoroso de nuestro personaje principal, es mi personaje favorito. Ella es la tranquilidad que envuelve el pecado, un pecado que realiza por necesidad, pero que no remueve su necesidad por lo trascendental. Las conversaciones entre ella y Rodia son impresionantes. Finalmente, quiero hablar de la Usurera, que efectivamente era una mujer mala (no para llegar a merecer la muerte, pero bueno), pero es muy triste como Rodia termina llevandose por delante a una persona totalmente inocente. No diré más para no hacerles spoiler.

A pesar de esto, no fue un libro fácil de leer, sobre todo por el exceso de descripciones que me agotaban. Sentía que era un libro mucho más largo de lo que en realidad tenía que ser y si llegaba un punto donde me sentía cansada de leer y leer y no avanzar. No obstante, creo que el autor tiene una capacidad increíble de entrar a la conciencia humana. Y es que definitivamente, ser buenos o malos depende de cómo nos sintamos haciendo algo. Y todas estas reflexiones envueltas en una ambientación demasiada oscura con personajes caminando por la calle sin rumbo fijo.

"No hay nada en el mundo más difícil de mantener que la franqueza y nada más cómodo que la adulación."

Así que aquí les dejo mi opinión de este libro que, si bien no fue para mi del todo, si que puedo rescatar varias cosas que me pusieron a reflexionar y entiendo por qué este autor es tan importante para la literatura rusa. Después hablaremos de otras novelas rusas - como Anna Karenina - que me reconciliaron un poquito con el estilo de este país. Y sin más, cuéntenme si ustedes han leído este libro o esta dentro de sus pendientes. ¡Nos vemos en el siguiente post!