La poesía vive cuando está conectada con la sociedad: La tierra baldía de T.S. Eliot.
¿Les ha ocurrido eso de pasar los ojos por las páginas pero no entender nada? Como que los ojos terminan separandose totalmente del cerebro y a pesar de que estás leyendo en el sentido más minímo de la palabra, los significados no están llegando... Bueno, con vergüenza les cuento que eso me ocurrió cuando leí La tierra baldía de T.S. Eliot. Pero quedénse hasta el final de la reseña porque mi relación con este poema terminó en final feliz.
Thomas Stearns Eliot nació en St. Louis, Missouri en 1888. No obstante, en 1927 adquiere la nacionalidad británica y es en Inglaterra donde se va a consolidar como poeta, dramaturgo, ensayista y crítico literario. Actualmente es considerado uno de los escritores más influyentes del siglo XX. Logró utilizar elementos de poesía moderna como la creación de voces y personales que rompen la perspectiva única; así, logra representar varias formas de hablar, incluyendo idiomas y ritmos. ¡Y todo esto en poesía!
Será en 1922 cuando, sentado en su máquina de escribir (para él, la única forma de "sacar" el poema desde un "instrumento") comienza a inspirarse en unas tiras cómicas policiacas que contenian varios personajes a los que los lectores debían ponerle voz. De hecho, el título original de La tierra baldía era He do the police in different voices. El poemario fue publicado. No obstante, parece que los lectores necesitaban ayuda para comprenderlo (¡los entiendo!). Es así como en el siguiente tiraje publican el libro con notas para hacerlo más comprensible; de esta manera, las mismas notas se convirtieron en un tema de estudio. Incluso más que el poema en si. A partir de aquí, no se vende La tierra baldía sin notas, por lo que algunos afirmaban que "perdió un poema que no camina sin muletas".
Para Eliot la literatura tenía que estar conectada con la vida. Es así como se remonta a los ritos sobre la fertilidad de la tierra para sentar las bases de su poema. Con esto, logró llevar relatos de origen al siglo XX, alcanzando su objetivo de crear poesía de vanguardia al abordar temas humanos y traer una nueva composición al poema dándole una estructura mitológica (conceptos de inter e hipertextualidad). Así, La tierra baldía se convierte en un camino de entrega, simpatía y paz para alcanzar la tierra fértil.
Toda esta interpretación claramente no resultó de mi lectura. Fui muy afortunada de leer este libro en un contexto académico que me permitió rescatar la riqueza de un autor cargado de intenciones literarias y sociales. De hecho, logra reflejar el desorden, la fragmentación y la crisis espiritual de la sociedad occidental tras la Primera Guerra Mundial, y este cuestionamiento a si mismo y a su entorno es lo que, para mí, dota de importancia a esta obra. Y si, estoy totalmente de acuerdo con Eliot: la literatura tiene sentido por y para los demás.
Hola me ha gustado el post, no conocía al autor y creo que buscare más sobre el y haber si me animo a leer alguna de sus obras, saludos
ResponderBorrarHola Sofía,
ResponderBorrarMe gustan mucho los libros y seguiré tu hermoso espacio literario.
en la Web.
Besos directos desde Rio de Janeiro - Brasil.
¡Hola! Este es un autor que todos deberíamos de leer alguna vez en nuestras vidas. Espero tengas un lindo día. ¡Besos!
ResponderBorrarHola,
ResponderBorrarGracias por la entrada, muy interesante.
Besos desde Promesas de Amor, nos leemos.