¿Cómo es entrevistar autores? - Algunas reflexiones.

De mis contenidos favoritos de hacer para Viajando entre Letras son las entrevistas a autores y autoras. No se si sabían, pero estudié Comunicación Social y Periodismo y hay una parte de mi que goza investigando, creando preguntas y, por supuesto, charlando con aquellos que pueden darme respuestas. Además, también cursé Estudios Literarios y Edición, un pregrado con el que pude llevar mi amor por los libros a otro nivel. Así que cada vez que puedo entrevistar a un autor o autora, me siento profundamente afortunada de poner unir mis dos grandes pasiones y esas carreras a las que les dediqué siete años de mi vida.

Así que hoy quiero compartir con ustedes 5 reflexiones sobre entrevistar autores basadas en mi experiencia. Tienen que ver con algunas preguntas que me han hecho, la logística para que este tipo de espacios se de y cómo fluir para que no sea una experiencia traumática. 

1. No, no siempre he leído los libros de los autores que entrevisto. Hubo un momento después de la Feria del Libro de Bogotá 2023 donde comenzaron a salir muchas entrevistas, una detrás de otra (¡qué felicidad!); sin embargo, por cuestiones de tiempo era fisicamente imposible lograr leer los libros para entrevistar a los autores. No obstante, mi intención a la hora de hacer una entrevista es plantear un tema que englobe la obra de un autor y discutir sus percepciones frente a esto, entre otras experiencias. Para hablar profundamente de un libro en particular tengo otros espacios como el Club de Lectura, y espero que a través de las entrevistas que hago los lectores puedan conocer más al autor detrás de la obra y queden antojados para ahora si leerlo. Para mi, es muy especial conocer quién está detrás del libro.

2. Son jornadas de prensa intensas. Usualmente cuando nos contactan para ir a entrevistar autores, es precisamente así, nos. No es un espacio que esté pensado para que vaya un solo periodista y listo, terminamos. No, al contrario. Se busca aprovechar al máximo tener al autor o autora y se coordinan entrevistas una tras otra, y si esto es en contexto de alguna Feria del Libro, es incluso más intenso porque vienen de otros países, las condiciones ambientales influyen en la salud del escritor, y tienen eventos además de entrevistas. Creo que esto para cualquier ser humano debe ser muy muy agotador; claro que los autores están preparados para esto y tienen la mejor disposición, pero es normal que llegue un punto en el que, si las preguntas son las mismas o no hay nada innovador en el espacio que tu como periodista propongas, si puede volverse algo agotador y monotono. Es parte del trabajo, claro que si. Pero un minuto en el que le preguntes al escritor cómo está, si necesita ir al baño, si desea una pausa, no está de más. 

3. Es más sencillo cuando sabes del tema. Si bien siempre organizo mis entrevistas de manera previa, me he dado cuenta que, gracias a mi experiencia siendo lectora, las conversaciones se convierten en un intercambio de anécdotas respecto a la lectura que tanto escritor como entrevistador pueden comprender. Es muy hermoso lograr ese vínculo y comprender que, ante todo, incluso los titulos que cada uno podamos tener, en realidad estamos lector a lector. Eso si, si trabajas para un medio de comunicación, no es tan facil elegir el tema sobre el que quieres entrevistar y ya, a veces este es impuesto. Por eso me siento tan feliz de poder hacer las entrevistas a mi gusto y que ustedes las disfruten también.

4. Los autores son personas, cada una con sus personalidades particulares. Como con todas las relaciones en la vida, hay personas con las que logras conectar más que otras, y eso también ocurre cuando entrevistas. Así como se puede dar el caso de tener frente a ti un autor con el que puedes hablar hasta más no poder, también hay otros que son más concisos, menos extrovertidos, y eso está bien. Es muy valioso tener esos primeros minutos previos a la entrevista donde puedas entender mejor algunas cosas de la personalidad del autor al que vas a entrevistar, eso puede darte pistas de hacia donde llevar la conversación y qué preguntas son en realidad pertinentes.

5. Conversar, no solo preguntar. De las cosas más dificiles de entrevistar es la cantidad de ideas que se agolpan en mi cabeza cada vez que el autor habla. El tiempo es limitado, no podemos quedarnos tres horas hablando con ellos, pero si que hay algunos autores con los que podríamos hablar y hablar de lo interesantes que son. Yo soy una persona estructurada, llevo mis preguntas, planeo de antemano cómo me gustaría que la conversación se encaminara. Aún así, he aprendido que en todo plan debe haber un espacio para la improvisación, o al menos para lo inesperado. Si la conversación se desvía por algo que dijo el autor y que quieres profundizar, ¡maravilloso! Eso demuestra que estás escuchando y que no tienes solo un cuestionario que quieres ir tachando. 

¡Y eso sería todo! Me encanta tener estos espacios donde puedo desahogarme de experiencias que no se ven en la pantalla cuando les publico la entrevista. Mi invitación es que sigan consumiendo este tipo de contenido porque es demasiado valioso, y si en algún momento desean o tienen que hacer entrevistas ustedes mismos, les dejo este video que hice con algunos tips para que sean un éxito: